Existen distintos tipos de Sistemas de Retención Infantil (SRI), según el peso y la edad del menor. Consejos.
Las sillitas infantiles o sistemas de retención infantil (SRI) son fundamentales para la seguridad de nuestros hijos y de todos los ocupantes del auto. Está comprobado que reducen en un 80% el riesgo de muerte y lesiones graves en caso de accidente, y su uso en la Argentina es obligatorio hasta los 10 años (12 en Ciudad de Buenos Aires).
Lo primero que hay que saber es que existen distintos tipos, homologados de acuerdo al peso y altura del niño. La oferta es variada. Hay grupos de SRI para bebés de 0 a 6 meses (hasta 10 kilos); de 0 a 15 meses (hasta 13 kilos); de 9 meses a 4 años (hasta 18 kilos); de 4 a 6 años (entre 15 y 25 kilos); y de 6 a 12 años (entre 22 y 36 kilos).
Lógicamente, la oferta de marcas y modelos también es amplia, ya que hay sillitas nacionales e importadas. En todos casos, para su correcta instalación, es de suma importancia seguir las instrucciones del fabricante del SRI y del manual del vehículo. Sin embargo, cómo podemos darnos cuenta si ella sillita estamos por comprar está homologada.
Cada huevito, butaca o booster debe contar con una etiqueta de certificación emitida por el país fabricante. Todas, cualquiera sea su procedencia, deben estar pegadas o cosidas y estar claramente visibles. Por ejemplo, las nacionales deben cumplir las normas IRAM 3680-1 y 3680-2; las europeas, las ECE R44/04; las brasileñas, INMETRO NBR 14400; las estadounidenses, FMVSS 213; y las de Australia y Nueva Zelanda, AS/NZS 1754.
Consejos para un traslado seguro
Según un estudio realizado por el Observatorio Vial de la Agencia Nacional de Seguridad Vial (ANSV), en Argentina solo 3 de cada 10 niños viajan protegidos.
OLX Autos, la división automotor de una de las ofertas e-commerce del mercado, brinda una serie de tips para reforzar cada detalle que tenga que ver con la seguridad de los niños.
– No viajar con objetos sueltos: se recomienda guardar la mayor cantidad de objetos en el baúl, especialmente aquellos que son más macizos como heladeritas, juguetes de plástico, valijas, entre otros.
Esto se debe a que en caso de un accidente, si se encuentran sueltos, pueden dañar a los pasajeros. De llevar juguetes para entretener a los niños, garantizar que haya más de un adulto en el auto para evitar que los objetos vuelen y distraigan al conductor.
– Trasladar a los menores en el asiento trasero: es importante que todos los pasajeros cuenten con cinturones de seguridad propios, y evitar llevar a los más pequeños a upa.
Esto se debe a que frente a un choque a 50 km/h todas las personas dentro del auto serán impulsadas por una fuerza que equivale a 40 veces el peso de cada una. Por ende, si alguna de ellas no se encuentra sujeta, esto puede generarle graves lesiones. Mientras que aplicando esta medida se reduce en un 70% esos riesgos.
– Asegurar las puertas: se recomienda re chequear que las puertas del auto estén bien cerradas, haciendo uso del seguro para niños. De esta manera se reducen las posibilidades de que accidentalmente los niños abran las puertas con el vehículo en movimiento, evitando así posibles lesiones.
– Contar con apoyacabezas: se estima que a partir de los 12 años, edad hasta la cual se recomienda el uso de SRI, o una vez que superan 1,50 metros de altura, los niños pueden comenzar a utilizar los cinturones de seguridad.
Teniendo en cuenta esto, es importante que los apoyacabezas siempre estén presente, ya que protegen tanto la cervical como el cuello de cada pasajero ante un posible accidente. Para que esto sea posible es necesario ajustarlos según la altura de cada uno.
– Planear juegos para hacer el viaje más entretenido: si bien algunos autos cuentan con pantallas incluidas, es recomendable tener en cuenta, especialmente para los más pequeños en los trayectos más largos, llevar algún peluche con sonido o texturas que lo entretengan durante el viaje.
También, la implementación de juegos tradicionales como el Veo Veo o guerra de canciones son clave para hacer del recorrido más entretenido.